Inició sus estudios artísticos en la Llotja de Barcelona y poco después comenzó a trabajar con los escultores Vallmitjana. Viajó a Francia, Italia e Inglaterra para ampliar su formación.
Su obra se considera representativa de la escultura realista anecdótica aplicada a la arquitectura de edificios construidos en el periodo modernista. Colaboró con arquitectos como J. Domènech i Estapà en el Hospital Clínic (1904; Casanova, 141-149), y con este mismo arquitecto y E. Sagnier en los relieves del frontón del Palacio de Justicia (1887-1908; paseo de Lluís Companys, 14).
También cultivó la escultura funeraria -de la que dejó muestras en el Cementerio de Montjuïc (Mare de Déu del Port, 56-58)- y se dedicó a tallar imaginería religiosa por encargo. Son obra suya algunas de las esculturas del Monumento a Colón (1888; plaza del Portal de la Pau) y de la Cascada del Parque de la Ciutadella (1882).