Esta fábrica de cerámica, conocida popularmente como "La Rajoleta" (pasaje Puig d'Ossa, s/n, Esplugues de Llobregat), fue fundada a mediados del siglo XIX. Su producción cerámica estuvo presente en la decoración de muchos edificios modernistas.

En 1876 Jaume Pujol i Bausis compró a su socio, Miquel Carbonell i Casas, la parte que le correspondía de una empresa de producción cerámica que habían adquirido dos años antes y que funcionaba desde 1858. A partir de aquel momento la fábrica inició un proceso de crecimiento hasta convertirse en una de las más importantes del período modernista.

Cuando murió Jaume Pujol i Bausis, en 1891, su hijo, Pau Pujol i Vila, dirigió la fábrica hasta 1913. A lo largo de este periodo, Pujol i Bausis pasó a ser una fábrica emblemática en el diseño y producción de cerámica modernista en un momento en que habían cobrado relevancia las artes aplicadas a la arquitectura, con arrimaderos, respiraderos o escamas; aún hoy encontramos ejemplos de esta empresa espluguense decorando gran parte de las casas modernistas.

Asimismo, hay que destacar su labor en el ámbito de la investigación, por ejemplo, en la recuperación y producción de la cerámica de reflejo metálico.

En su taller se realizaron piezas con diseños de los mejores arquitectos de la época, como L. Domènech i Montaner, A. Gallissà, A. Gaudí y J. Puig i Cadafalch, entre otros, y de artistas como L. Bru o A. Gual. Por tanto, trabajó en obras como la Casa Amatller (1898-1900; paseo de Gràcia, 41), el Hospital de la Santa Creu i Sant Pau (1902-1930; Sant Antoni M. Claret, 167), el Park Güell (1900 - 1914), el Palau Güell (1885-1889; Nou de la Rambla, 3-5), la Casa Navàs (1901-1907; plaza del Mercadal, 5, Reus), el Institut Psiquiàtric Pere Mata (1898-1922; paseo Briansó, s/n, Reus) y la Casa Barbey (1910; paseo, 5 - Figueral, 48, Illa Raspall, la Garriga), por citar algunas.

Actualmente, el recinto de la fábrica Pujol i Bausis, junto con el amplio conjunto de hornos de cocción de cerámica, es un espacio abierto al público que pertenece al Museo Can Tinturé de azulejos (Església, 36), del Ayuntamiento de Esplugues de Llobregat. Al cierre de esta edición, está previsto que se convierta, en un futuro próximo, en un centro museístico centrado en el estudio de la cerámica industrial, haciendo una especial incidencia en el Modernismo.