Miembro de una familia de artistas -tanto su abuelo como su padre eran decoradores murales-, se formó en la Llotja de Barcelona y se marchó a París, donde trabajó en el taller de Cambon.
A su vuelta, en 1889, se asoció con su tío M. Moragas, con el que creó la sociedad Alarma i Moragas. A lo largo de su trayectoria participó en los espectáculos de L. Graner, dedicados al teatro modernista.
La producción de este autor se extiende más allá de Barcelona: realizó trabajos en Madrid, Buenos Aires y La Habana, donde tuvo mucho éxito.
A partir de 1927 fue director de la sección de escenografía del Institut del Teatre de Barcelona.